María Eugenia Velásquez
Casa Pasiva, o Passivhaus en Alemán, es un estándar de eficiencia energética que se utiliza en el diseño de casas y edificios para reducir así su huella ecológica. Esto resulta en viviendas ultra eficientes que requieren muy poca energía para calentar o enfriar sus espacios y sentirnos confortables.
El concepto de arquitectura pasiva no es nada nuevo. Aunque resulte difícil de creer, hace 2.500 años en Grecia, Sócrates ya escribía sobre un tipo de arquitectura que se adaptaba a las condiciones climáticas de su entorno. Sócrates rediseñó el Megaron - el gran salón que se encontraba en los palacios - con una estructura trapezoidal que conseguía captar más energía solar en invierno y mantener el confort en verano gracias a los voladizos del porche.
Luego, debido a una escasez de combustible que hubo en Roma, se decidió adoptar la técnica solar desarrollada por Sócrates pero adaptándola a los diferentes climas del imperio. Así pues, se adaptaron diseños de casas para el clima de Roma, Egipto, España, etc.
Lamentablemente, el beneficio económico que supone la explotación de los recursos energéticos truncó el desarrollo de este tipo de arquitectura durante muchos años (demasiados).
No es sino hasta la década de 1970, en el contexto de una crisis energética, que renace el interés en la arquitectura pasiva y del aprovechamiento de la energía solar en edificios, principalmente en Norte América en donde se construyeron varios edificios perfeccionando estas técnicas.
El innovador sistema que ahora conocemos como el estándar Passivhaus, fue diseñado en 1988 por Bo Adamson de la Universidad Lund en Suecia, junto a Wolfgang Feist del Institut für Wohnen und Umwelt (Instituto de Vivienda y Medio Ambiente).
Ellos desarrollaron el concepto como parte de un proyecto de investigación subvencionado por el Ministerio de Medio Ambiente de Alemania. A partir de esto, en los siguientes años se construyeron varios proyectos piloto.
Habiendo sumado la experiencia práctica a los conocimientos teóricos, en 1996 se fundó el Passivhaus-Institut con el objetivo de promocionar, controlar y promover el desarrollo de este estándar.
Para ser certificados Passivhaus, las casas o edificios deben cumplir los siguientes requisitos básicos:
Como puedes ver, la idea de construir casas eficientes no es una novedad. Desde hace miles de años el hombre ha buscado alternativas de viviendas sostenibles, así que la tecnología está ahí, pero de nosotros depende llevarla a la práctica.
¿Listo para dar el primer paso hacia tu nueva casa pasiva de madera? Nos encantará conversar contigo, agenda una videollamada con nosotros.
Zapatas corridas son para suelos firmes; pilotes helicoidales, para suelos blandos o desniveles; la elección depende del terreno y presupuesto.
Leer másHablamos de sistemas constructivos líquidos y destacamos la eficiencia y sostenibilidad de la combinación de entramado ligero y madera contralaminada en la construcción.
Leer más